Mi propósito es acompañarte en tu camino de autoconocimiento hasta la reconciliación con tu fuente creadora, para que crees de manera consciente la vida que quieres vivir.

Por mucho tiempo sentí que solo sobrevivía a la rutina del día a día, sufría una crisis existencial, no estaba satisfecha en mi parte profesional, como esposa, como madre y como hija, sin embargo, estar en mi zona conocida me hacía pensar que si bien no era plena “tampoco estaba tan mal”, esto motivada por el mejor mecanismo de protección que todos tenemos “El miedo”, el miedo al que dirán, el miedo a empezar de cero, el miedo al fracaso, el miedo a no pertenecer, incluso el miedo al éxito, por mencionar solo algunos.
Lo anterior consecuencia de decisiones tomadas desde mi falta de merecimiento, desde la necesidad de pertenecer, de agradar a todo el mundo, de sentirme validada, protegida, reconocida y amada por quienes formaban parte de mi entorno, dándoles la responsabilidad de llenar mi vacío interno cuando esa responsabilidad todo el tiempo me correspondió a mí.

Afortunadamente la incomodidad no ceso, y esa voz interna llamada intuición me insistía que estaba en este mundo para algo más que solo “nacer, crecer y reproducirme” (cumplir estereotipos o expectativas sociales), por lo cual elegí hacer caso a esa voz que me insistía que justo detrás de mis miedos esta la vida que merezco.

Después de cursos, libros y retiros me di cuenta que estaba confundiendo conocimiento con acción y que estaba buscando en lo exterior las respuestas que únicamente yo podía responder, así que por primera vez me detuve para voltear a verme, puse en práctica mis conocimientos acerca del despertar espiritual y desarrollo personal emprendiendo el viaje a mi autoconocimiento.
Entonces pude recobrar mi autonomía, deje de sentirme víctima y ya nada fue personal, ahora mis sentimientos no dependen de la actitud de los demás y ser consciente de eso me acerca más a Dios.